Siempre hemos creído que cuando un chico invita a una fémina al cine, sus intenciones van más allá de compartir juntos impresiones sobre la dirección artística de la película, su edición de sonido o el hilo musical antes de la proyección.
No obstante, un estudio realizado por la Escuela de Educación Infantil “Cariñitos”, ubicada en Wisconsin de la Frontera se ha encargado de desmentir este viejo mito de los cines: hacer el amor no es el principal objetivo de los hombres a la hora de invitar a personas del sexo opuesto a una proyección cinematográfica.
La encuesta, realizada a varones y hombres de 15 a 45 años y 6 meses, revela que solo el 14% de los hombres que invitan al cine a mujeres, lo hacen con intención de hacerles el amor a corto plazo. La mayoría de los encuestados (28’3%) afirman que el principal objetivo de su invitación no es ni más ni menos que “Mojar”. Del mismo modo, un 22’5% reconoce que sus intenciones no van más allá de un “Aquí te pillo, aquí te mato”. “Echar un polvo” (15’2%), “Poner una pica” (14’7%), “Liberar al kraken” (12’3%) o “Ensartar” (10’3%) fueron algunos de los motivos que alegaron el resto de los encuestados.
Cabe destacar razones tan alejadas del tópico sexual como “hacerle un destrozo a la Mamen”, mencionado por un 0’003% de la muestra.
Las reacciones de personalidades de la industria no se han hecho esperar. “Ahora tendré que hacer dramas” confesó Mario Casas al comprender que pocos de los que visionan sus cintas en cines harán el amor esa noche. E.L. James, autora de 50 Sombras de Grey, se ha visto obligada a revender su recién comprada isla en las Bahamas tras conocer que la productora Universal Pictures ha cancelado la adaptación de las secuelas restantes de su célebre obra al saltar esta noticia.
Por su parte, la marca de desodorantes Axe ha retirado toda su publicidad de las salas alegando que “dónde vamos a parar”. Por último, en el Instituto de la Mujer siguen las reuniones para tratar de averiguar de qué modo los resultados de este estudio denigran a la mujer.