Hola amigos cinéticos, soy Juanca Van Dan y hoy vengo a hablaros de la peli de 300, 2. No 302, sino la peli de 300 pero la 2. Que hay que explicarlo todo…

AVISO: Esta crítica contiene esa palabra inglesa que usamos cuando no queremos que la gente que no ha visto el Sexto Sentido sepa que Bruce Willis está muerto.

Bueno básicamente esta peli es igual que la anterior pero cambian los nombres y las caras pero lo importante es que sigue apareciendo el drag queen de 2 metros y medio para que tengamos claro quién es el malo. Nos cuentan porqué se convierte en una mala pécora, ya que vemos que él al principio era un buen chaval con cara de pastor de cabras pero tuvo que meterse en una bañera que provoca cáncer y travestismo a partes iguales y salió lo que salió. La verdad que no me acuerdo bien quién iba contra quién, el caso es que a la hora de zurrarse siguen haciéndolo a cámara lenta para que los espectadores medios podamos practicar en nuestras casas cómo dar una patada en el pecho a la espartana.

El punto fuerte que tiene la peli son sus diálogos. Son tan malos que no necesitas prestarle atención y así puedes dedicarte completamente a mirar sin reparo los cuerpazos aquí presentes.  Además esta vez las peleas no son en un descampado como en la anterior, sino en alta mar, incluso con caballos.

El prota lleva un caballo que salta de barco en barco, nada, bucea, se clasífica para los 800 espalda y rellena la declaración de la renta, mientras el prota reparte muerte a los malos. Las cosas explotan porque sí, la sangre fluye y los malos pierden como en toda buena película que se precie, como todos los cinéticos saben.

La verdad es que es una de esas pelis que te marcan, que transforman tu modo de ver las cosas y sacuden tu mundo. Nada más salir del cine decidí pincharme esteroides como si fuera a salir en los Mercenarios 4 y empezar a moverme a cámara lenta. Lo malo que es que resulta que tuve un derrame cerebral.

En cuanto a los aspectos puramente técnicos de la cinta cabe resaltar que la actriz principal enseña las tetas o pechos.

Mi valoración es de 8 explosiones nucleares sobre 10.